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En un par de semanas, el 06 de junio, tendremos las elecciones intermedias más grandes en la historia del país, no solo por la cantidad de electores, sino también, por el número de cargos que se elegirán, pues las 32 entidades del país tendrán elecciones locales junto con la federal. Se trata de un total de 21 mil cargos de elección popular.
Estar en una campaña política como joven es muy satisfactorio, pero cuando estás coordinando una parte de dicha campaña es también estresante y desgastante. Como joven, puedo platicar que es la primera campaña política que toca involucrarme directamente en la coordinación juvenil.
Hacía tiempo que conocía a la candidata que apoyo, cuando formamos e intentamos crear como partido político a México Libre, yo era (soy) coordinador de jóvenes de la Alcaldía de Coyoacán de dicha organización. Cuando el PAN le pide ser candidata a Diputada Federal por el distrito electoral 10 en la Ciudad de México, nos convocan a una reunión donde nos solicitan a mi y a otros compañeros llevar la “batuta” del grupo juvenil de la candidata.
Como lo comentaba en líneas anteriores, es muy gratificante tener esta oportunidad de apoyar a la candidata que, además, es una gran mujer y colega, tanto por la política como en la docencia.
¿Qué he aprendido?
La verdad muchísimas cosas, una de las más importantes es ver que puedo hacer mucho por mi país desde mi trinchera, además que descubrí y estoy explotando mi liderazgo y empatía con demás jóvenes. Uno de ellos me platica: “Los jóvenes somos el futuro y hoy somos un fuerte porcentaje de la población mexicana, por lo tanto, debemos participar de forma entusiasta y comprometidos con la recuperación democrática de nuestro país frente a un gobierno con enormes deficiencias y preocupantes signos dictatoriales.”
Es interesante que este joven, con un gran potencial y liderazgo, tiene escasos 16 años, estudia la preparatoria y ya está involucrado en la “magia” de las campañas, apoyando a su país y viendo por el bien de los demás.
Otro de mis compañeros me decía que es interesante participar en las campañas porque te das cuenta de las diversas realidades de tu país, además de cosas más administrativas como el tema de presupuestos, regalos de campaña y fiscalización, una campaña va más allá de entregar flyers o de simples recorridos.
También, comenta otro joven que: “es muy importante que ellos (los jóvenes) como ciudadanos, tomen el control de la vida pública de México, en lugar de que sean los mismos políticos de siempre y sus círculos más cercanos. Las campañas electorales son una excelente forma de comenzar a conocer y aprender sobre los procesos electorales y sobre la política.”
Entonces… una campaña política, a los jóvenes nos enseña varias cosas: diplomacia, empatía y simpatía, finanzas y asuntos legales, fiscalización, comunicación, pero sobre todo… experiencia y muchos amigos.
Recuerdo que antes de iniciar la campaña, nuestra candidata nos dijo: “diviértanse en la campaña, para eso estamos y para aprender”.
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